Si bien los videos virales hacen que los aterrizajes de emergencia parezcan fáciles en las circunstancias adecuadas, estos aterrizajes pueden salir mal, muy mal, y muy rápido.
Este fue el caso en un trágico accidente el pasado sábado 14 de mayo en Miami, Florida, donde alguien perdió la vida.
Según relatos de testigos presenciales y declaraciones de la policía de Miami-Dade, un Cessna 172 con tres ocupantes volaba desde el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale al Aeropuerto Internacional de Key West. En algún momento durante el vuelo, el avión monomotor perdió potencia del motor. El Cessna intentó aterrizar en el puente Haulover Inlet Bridge, que lleva a la avenida Collins Avenue.
Cuando el Cessna estaba a punto de aterrizar, un SUV cruzaba el puente en dirección opuesta. El avión chocó contra la camioneta, volcó, se estrelló contra la superficie de la carretera y estalló en llamas. Dos personas en el avión resultaron heridas en el accidente y fueron hospitalizadas. El tercer ocupante, un controlador de tráfico aéreo de 36 años, murió. No está claro quién estaba pilotando la aeronave durante el incidente.
Afortunadamente, la mujer que conducía la camioneta y sus dos hijos pequeños a bordo solo sufrieron heridas leves y solo fueron hospitalizados como medida de precaución. Un portavoz de la policía de Miami-Dade dijo: “Es milagroso que estés viajando en un vehículo, ya sabes, como la conductora con los dos niños pequeños, y sufrir una colisión frontal con un avión y que todos estén bien. Estamos agradecidos por eso, pero aún así es desafortunado que hayamos perdido a alguien en este accidente”.
Las imágenes del lugar del accidente que han circulado son desgarradoras. Los restos del Cessna en llamas y la parte delantera hundida del SUV representan un accidente que uno supondría que tuvo más víctimas. Es increíble que la cabina de pasajeros del SUV haya resistido en gran medida el impacto de un pequeño avión monomotor.
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