Bajan a 90 los desaparecidos por el derrumbe en estado de Washington

Los equipos de búsqueda siguen sus labores para tratar de localizar alguna persona con vida

Familiares de los desaparecidos se unen en un servicio religiosos en Darrington, para rezar por la pronta localización de sus seres queridos

Washington  - Las autoridades redujeron, al acabar la quinta jornada de búsqueda anoche,  de 176 a 90 la cifra de desaparecidos en el derrumbe en el estado de Washington, y mantuvieron en 24 la de muertos.
Además, no se ha podido comprobar dónde se encuentran ni tampoco si estaban en el lugar del suceso el sábado 35 personas que hasta ahora se contaban como desaparecidas.El jefe de bomberos del condado Snohomish, Travis Hots, había informado con anterioridad de que se confirmó la muerte de 16 personas y que se han localizado ocho cadáveres sin identificar que todavía no han sido recuperados.

 

El deslizamiento de tierra tras prolongadas lluvias sepultó bajo fango, rocas y troncos de árboles las viviendas de Oso, un poblado con 180 habitantes, y de Darrington, con unos 1,350 habitantes.
En algunos sitios la pila de fango y escombros alcanza diez metros de altura.Entre las víctimas fatales identificadas se cuenta el excomandante de la Marina de Guerra John Regelbrugge, cuyo cuerpo recuperaron sus dos hermanos que se habían sumado a las labores, dificultadas por la inestabilidad del terreno.Poco después, los socorristas hallaron el cuerpo de la esposa de Regelbrugge, Kris, madre de cinco hijos.

Persiste la esperanza

El director del Departamento de Emergencias del Condado, John Pennington, dijo en conferencia de prensa que, aunque se ha solicitado la ayuda de un equipo forense del estado para identificar víctimas, todavía persiste la esperanza de hallar a más pobladores con vida.
El canal KIRO-TV de la televisión local informó de que los equipos de socorro recibieron otras cuarenta bolsas para el traslado de cadáveres."Esto habla por sí mismo de la situación", comentó Pennington.Las tareas de búsqueda se complicaron en las últimas hoaras por el empeoramiento de las condiciones meteorológicas, pero contaron con la ayuda de equipos de la Guardia Nacional de Washington, y de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias.Dado que el deslizamiento bloqueó el curso del río Stillaguamish las autoridades extendieron su advertencia de posibles inundaciones río arriba, y de aluviones río abajo si el dique formado por rocas y fango se desmorona.

Habían advertido la tragedia

Mientras la búsqueda de sobrevivientes y de cadáveres entra en el quinto día, los medios locales han empezado a publicar los antecedentes que advertían a los pobladores sobre los peligros de deslizamientos de tierra en el área.
Un informe de 2010 encargado por el condado Snohomish en cumplimiento de una ley federal, advirtió de que los caseríos y poblaciones a lo largo del río Stillaguamish se contaban entre las áreas con más riesgos para este tipo de alud.El informe de la firma Tetra Tech de ingeniería y agricultura señaló, según el diario The Seattle Times, que la colina que se derrumbó el sábado era una de las más peligrosas.Pennington indicó que las autoridades locales han mantenido su vigilancia y han repetido sus advertencias y que los dueños de propiedades "eran muy conscientes del potencial de deslizamientos".La zona ha sido conocida por mucho tiempo como "el deslizadero Hazel" por la frecuencia de derrumbes en el último medio siglo. El mayor, antes del ocurrido el sábado, fue en 2006.
Relacionado / Marzo 26, 2014
Los equipos de socorro recuperaron diez nuevos cuerpos tras el alud registrado este sábado en el estado de Washington, por lo que el balance es hasta ahora de 24 muertos, anunciaron este martes las autoridades.

"Desafortunadamente, no pudimos encontrar ninguna señal de vida", dijo el jefe de bomberos del condado de Snohomish, Travis Hots, en una rueda de prensa, tres días después del alud.
El número de desaparecidos se mantiene en 176, pero hicieron énfasis en que podía haber algún doble conteo o personas que no se habían puesto en contacto con sus familiares aún, pero que podrían a estar a salvo.

El lunes, dos días después del deslizamiento de tierra en el pueblo de Oso, 95 km al noroeste de Seattle, las muertes confirmadas subieron a 14.
Un total de 49 viviendas de este pueblo rural se vieron golpeadas por el muro de lodo, rocas y árboles de 2,5 km2 causado por el alud, que también destrozó parte de una carretera.
Hots dijo que la operación de emergencia está destinada tanto a buscar sobrevivientes como a recuperar cuerpos, pese a que las probabilidades de encontrar personas con vida disminuyen día a día.
"No hemos perdido esperanzas de la posibilidad de encontrar a alguien" con vida, dijo.


Relacionado / Marzo 25, 2014 

El lodo se llevó por delante al menos seis residencias de la pequeña comunidad de Oso, donde viven cerca de 200 personas, y que se encuentra 60 kilómetros al noreste de Seattle. Hay 108 personas desaparecidas.

Al menos 14 personas resultaron muertas y 108 siguen desaparecidas tras un corrimiento de tierras ocurrido el sábado en el condado de Snohomish, una zona rural del noreste del estado de Washington (costa oeste), informaron las autoridades locales.
John Pennington, responsable de emergencias local, fue la autoridad que precisó que existe una lista de 108 desaparecidos, pero que agregó que eso no significa que estén heridos o muertos, sino que es una lista consolidada de varias autoridades con las que están trabajando.
Entre los desaparecidos están, mayormente, los trabajadores de construcción del barrio y gente que simplemente conducía por la zona. Pennington comentó que el hecho se produjo en la mañana del sábado, cuando la mayoría de las personas está en casa.
El lodo se llevó por delante al menos seis residencias de la pequeña comunidad de Oso, donde viven cerca de 200 personas, y que se encuentra 60 kilómetros al noreste de Seattle.
"No hemos escuchado o visto signos de vida hoy allí", dijo Travis Hots, jefe de bomberos del condado de Snohomish County este domingo en rueda de prensa, en declaraciones recogidas por el diario Seattle Times, después de que la noche del sábado reconociese que habían escuchado peticiones de auxilio.
Hots indicó que más de un centenar de efectivos trabajan en las labores, quienes rescataron en las últimas horas un nuevo cadáver, elevando la cifra de fallecidos a cuatro.

Además, ha confirmado que otras 108 personas se encuentran desaparecidas, a causa de un deslizamiento de tierras "masivo", y que las autoridades cifran en más de kilómetro y medio de ancho.
El barro ha sepultado parte de una carretera estatal, por lo que las autoridades han recomendado la evacuación de los residentes cerca del río Stillaguamish, ya que la tierra estaba bloqueando el curso fluvial y podría provocar inundaciones.
Además de los ocho fallecidos, el alud de lodo causó una decena de heridos, cuatro de los cuales están se encuentran en estado grave, entre ellos, un bebé de seis meses, y están siendo tratados en el Harborview Medical Center de Seattle.


 Relacionado / Marzo 24, 2014

Al menos ocho personas murieron y otras 108 permanecen desaparecidas tras el deslizamiento de tierra ocurrido el pasado sábado en Oso (Washington, Estados Unidos), según lo informaron este lunes las autoridades del estado.

John Pennington, jefe del departamento de Emergencias del condado de Snohomish, indicó que aunque el número de desaparecidos se elevó drásticamente (de 18 a 108), los informes aún son vagos y no significan que habrá ese número de víctimas.

Contenido relacionado

• Buscan desaparecidos tras deslave en estado de Washington
• EE.UU.: 18 desaparecidos tras deslave en estado de Washington
• EE.UU.: tres personas mueren por deslizamientos en estado de Washington

Pennington también resaltó que como el deslave ocurrió un sábado por la mañana, había mucha gente dentro de sus residencias. Se cree que de las 49 estructuras que resultaron afectadas, al menos 25 se encontraban ocupadas.

Situación "sombría"

Los ocho cadáveres fueron encontrados en un área de un kilómetro y medio cuadrado, donde casas y autos quedaron sepultados bajo casi cinco metros de lodo, piedras y ramas. En algunos sitios el alud de fango, roca y troncos alcanza una altura de casi siete metros.

Se calcula que unas 30 casas quedaron destruidas por completo.

"La situación es muy sombría, pero tenemos la esperanza de que hallaremos gente viva", dijo el jefe del Cuerpo de Bomberos del condado Snohomish, Travis Hots.
Según Hots, las autoridades se encuentran trabajando en el rescate, a pesar de las dificultades que supone el espesor del lodo. Algunos socorristas han terminado hundidos hasta los hombros y tuvieron que ser rescatados con cuerdas.
Hots destacó, sin embargo, que entre los escombros no han encontrado a nadie con vida desde el sábado.

Área propensa a deslaves

Las frecuentes lluvias y la geografía de la zona hacen que sea propensa a deslizamientos de tierra.
Hace menos de una década, otro deslave ocurrió en la misma área.
Geólogos y otros expertos dijeron que, probablemente, el río Stillaguamish causó erosión en una zona que había sido formada por glaciares.
Las autoridades creen que el incidente del sábado fue causado por tierra inestable por las recientes lluvias.

El gobernador del estado de Washington, Jay Inslee, describió la escena como "una milla cuadrada de devastación total" después de haber sobrevolado el lugar el domingo al mediodía, y aseguró a las familias que se está haciendo todo lo posible para encontrar a sus seres queridos desaparecidos.