Una camioneta comercial se estrelló el lunes contra un camión en el noroeste de China, dejando nueve personas muertas y elevando a 56 el total de víctimas fatales en tres accidentes viales grandes durante los últimos dos días, evidencia de lo peligroso que son las carreteras en China.
El accidente más reciente ocurrió en la provincia de Shaanxi poco después del amanecer, informó la agencia oficial de noticias Xinhua. No ofreció más detalles.
El domingo, 36 personas murieron calcinadas cuando un autobús de dos pisos y con servicio de litera se estrelló contra un camión cisterna cargado de metanol en otra autopista en Shaanxi, lo que ocasionó que ambos vehículos se incendiaran.
Xinhua dijo que 39 personas iban en el autobús para viajes de larga distancia y que sólo tres sobrevivieron. Dijo que fueron hospitalizados, pero no abundó en su condición.
El camión cisterna recién había vuelto a la autopista luego de una parada de descanso, cuando al parecer el autobús lo alcanzó por detrás alrededor de las 2:40 de la madrugada, cerca de ciudad de Yan'an en Shaanxi, dijo un cibersitio oficial de noticias.
Fotografías de Xinhua mostraron la estructura carbonizada del autobús, incrustada en la parte trasera del camión.
En otro accidente el domingo, la agencia Xinhua dijo que 11 personas murieron y otras tantas resultaron heridas de gravedad cuando una camioneta se estrelló con un camión en la provincia de Sichuan, en el sureste de China. No ofreció más detalles.
La seguridad en las autopistas es un problema grave en China. Según información de Xinhua, el mal mantenimiento de los caminos, aunado a los malos hábitos de conducción dan como resultado unas 70.000 muertes y 300.000 heridos al año.
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