News

6/recent/ticker-posts

¿Cuánto vale la vida humana? La contienda política por terminar el confinamiento en EEUU

La reapertura económica de Estados Unidos desata disparidades entre quienes quieren reactivar rápidamente el país y quienes piden no precipitarse. Entre una solución y otra están en juego la supervivencia de millones de personas, humana y económica.
Más de cinco millones de personas viajando a diario en metro. Decenas de miles de restaurantes, bares, tiendas y teatros abarrotados. 40 mil aficionados coreando al unísono a su equipo en el Yankee Stadium. Nueva York es una megalópolis densa e intensa, repleta de gente. Gran parte de los nueve millones que la habitan comparten hoy algo en común: han dejado de atestar las calles para vivir en confinamiento. Muchos de ellos compartirán algo mañana: la crisis económica. 
Sólo en abril, Estados Unidos perdió más de 20 millones de empleos. Esta cifra refleja la mayor pérdida desde 1939, según la Oficina de Estadísticas Laborales, y deja a más estadounidenses sin trabajo que la Gran Depresión. 
Para minimizar el caos financiero, el gobierno de Donald Trump persigue reactivar la economía de Estados Unidos lo antes posible. La previsiones de crecimiento del PIB para este año eran favorables. Con la pandemia, se desplomaron: después de crecer un 2.1% los últimos meses de 2019, ahora cae un 4.8%. 
Pero no es el PIB lo que debería medir qué tan bien le va a un país, sino el bienestar ciudadano. ¿Es justa la distribución de riqueza? ¿De dónde viene el crecimiento de este PIB? ¿Implica que unos tengan mucho y otros muy poco? Estas son cuestiones a menudo olvidadas por quienes aseguran preocuparse por el bienestar de los suyos, aquellos que otorgan el oro al PIB en el podium de los valores que importan para el confort de su nación.

¿Cuánto vale una vida humana? 

Distintas autoridades como el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, creen que para Trump es más importante la salud financiera que la pública, y que su prisa podría suponer un grave costo para la vida humana. 
PlayGround_GobernadorNuevaYork_AndrewCuomo
EL GOBERNADOR DE NUEVA YORK, ANDREW CUOMO, EN CONFERENCIA DE PRENSA SOBRE EL CORONAVIRUS / EFE
“Hay un costo de mantenernos cerrados, un costo económico y personal, pero también hay un costo de reabrir rápido. Cuanto más rápido abramos, más bajo será el costo económico, pero más alto el costo humano, porque se perderán más vidas. […] ¿Cuánto vale una vida humana? Para mí, no tiene precio”, declaró en rueda de prensa.
Para el mandatario de la ciudad que se convirtió en epicentro de la pandemia a nivel mundial, es vital que los hospitales tengan al menos un 30% de camas libres antes de desconfinar del todo a los neoyorquinos, y que se tenga capacidad de hacer tests suficientes para detectar de inmediato nuevos casos. 
Pero esto está a “semanas vista y posiblemente más lejos” aseguró el vicedirector del Centro Nacional para la Preparación de Desastres de la Universidad de Columbia, Jeff Schlegelmilch, en una entrevista con EFE. 
¿Cómo pedirle a quienes tienen poco o nada, a quienes lo están perdiendo todo, que aguanten  más? A diferencia de Dinamarca o España, Estados Unidos no cubre el 90% o 70% de los salarios de quienes están perdiendo el empleo. Seguramente, si estas personas tienen que decidir entre salir a ganarse la vida corriendo riesgo de contagio o quedarse en casa viendo como su cojín económico se desploma, elegirán lo primero. 
PlayGround_DonaldTrump_conferencia_AndrewCuomo_Coronavirus
EL PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS DONALD TRUMP JUNTO AL VICEPRESIDENTE MIKE PENCE VIENDO UNA CONFERENCIA DE PRENSA DEL GOBERNADOR DE NUEVA YORK, ANDREW CUOMO, SOBRE EL CORONAVIRUS / EFE

La contienda política por la reapertura

Mientras distintos Estados inician la reapertura y más estadounidenses urgen regresar a su “normalidad” y ocupar de nuevo sus puestos de trabajo, también incrementa la la estimación de muertes por coronavirus —más de 300 mil para agosto: “Cuanta más gente en contacto, más alta la propagación del virus. Cuanta más gente infectada, más gente muere. Y por eso los modelos de proyección van hacia arriba”, sentenció Cuomo.
Anthony Fauci, la voz científica líder de la pandemia en Estados Unidos y director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, se suma a los reclamos del gobernador de Nueva York. Manifestó este martes que el país podría ahorrarse sufrimiento si no se precipita y que, muy probablemente, 80 mil no sea la cifra correcta de fallecidos por Covid-19, si no que podría ser mucho más elevada.
Con la apresurada aceleración de la apertura financiera del país, el propio gobierno de Estados Unidos va en contra de las medidas que prometió y de la recomendaciones de expertos. Según recientes declaraciones de la Organización Mundial de la Salud, se necesita un “control extremo y rastreo de contagios” para reactivar la economía. “Si la enfermedad persiste a un nivel bajo sin la posibilidad de investigar grupos, siempre existirá la posibilidad de que el virus vuelva a despegar”, señaló Mike Ryan, jefe del programa de emergencias.
Lejos de buscar soluciones multipartidistas, Trump utiliza la contienda política desencadenada por el dilema de la reactivación como un intento para desbancar a la oposición en las elecciones del próximo noviembre, donde se juega su renovación. Este lunes acusó a los demócratas de  “querer retrasar” la reapertura y utilizarlo como estrategia para socavar su futuro electoral.

The great people of Pennsylvania want their freedom now, and they are fully aware of what that entails. The Democrats are moving slowly, all over the USA, for political purposes. They would wait until November 3rd if it were up to them. Don’t play politics. Be safe, move quickly!



El mal ejemplo de quienes más tienen

“Retomar las actividades diarias demasiado pronto supone el riesgo de un repunte de casos que pondría en peligro la relativa estabilidad que hemos visto en nuestro sistema hospitalario”, informó el condado de Alameda, California, cuando el consejero delegado de Tesla, Elon Musk, amenazó con reabrir su fábrica aunque fuera arrestado y con mudar el negocio a Nevada o Texas. 
Musk no es precisamente el ejemplo de sensatez en esta pandemia y ha insistido en minimizarla en su cuenta de Twitter. Incluso llamó “fascistas” a quienes alargaban el periodo de cuarentena por no “devolver la libertad” a los ciudadanos. 

Tesla is restarting production today against Alameda County rules. I will be on the line with everyone else. If anyone is arrested, I ask that it only be me.



Pero Trump y Musk no son los únicos empresarios multimillonarios que apremian la reapertura. Otros, como el ex presidente del banco Goldman Sachs, llevan presionando al gobierno en redes sociales desde hace semanas:

Extreme measures to flatten the virus “curve” is sensible-for a time-to stretch out the strain on health infrastructure. But crushing the economy, jobs and morale is also a health issue-and beyond. Within a very few weeks let those with a lower risk to the disease return to work.



Aunque hay quienes prefieren ser aún más explícitos, como el ex presidente del banco Wells Fargo, Dick Kovacevich: «Podemos traer gradualmente de vuelta a esas personas y ver qué sucede. Algunos enfermarán, algunos incluso puede que mueran, no lo sé […] ¿Quieres sufrir las consecuencias económicas o el riesgo de tener síntomas parecidos a los de la gripe o una experiencia como la de gripe? Tienes que elegir».

Publicar un comentario

0 Comentarios