News

6/recent/ticker-posts

¡Campeones! Estrellas brillan en lo más alto cinco décadas después


Cuando las manecillas del reloj marcaban las 11:57 de la noche de este miércoles y tras 51 años y nueve días de su último título, el equipo de las Estrellas Orientales hicieron realidad el “sueño verde”: Lograr la ansiada corona de campeón del béisbol invernal profesional dominicano.
Tras derrotar a domicilio con blanqueada de 4-0 a los Toros del Este, con gran labor ofensiva de José Sirí, designado “Jugador Más Valioso” de la serie, las Estrellas consiguieron su quinta victoria de esta serie final para llevarse el trofeo BHD León que lo acredita como campeones del torneo dedicado al inmortal de Cooperstown Vladimir Guerrero. La serie final terminó 5-1 a favor de los nuevos campeones.
El trofeo fue entregado por Vitelio Mejía, presidente de la Liga Dominicana de Béisbol y fue recibido por José Mallén, presidente de las Esrellas Orientales.
El último título ganado por las Estrellas ocurrió el 14 de febrero de 1968, en una final contra los Leones del Escogido en una serie que concluyó 5-3. El primer campeonato de los Paquidermos fue en la campaña 1954.
El equipo de las Estrellas también contó con gran labor monticular del abridor Néstor Cortés (2-0), quien laboró a lo largo de seis innings en blanco, permitiendo cinco hits, cinco ponches y un boleto para ser el ganador del partido y fue secundado por Odrisamer Despaine, Román Méndez y Jumbo Díaz. Perdió Paolo Espino (0-2).
Sirí disparó par de sencillos y remolcó dos carreras, mientras que Héctor Giménez, pegó un doble y remolcó otra.
((LAS CARRERAS Las Estrellas abrieron el marcador con una vuelta en el quinto ante el abridor Paolo Espino. Daniel Mayora abrió con un doble por el bosque izquierdo y luego de dos outs vino un sencillo remolcador de José Sirí. Estrellas 1, Toros 0.
Los Paquidermos agregaron otra en el sexto cuando Miguel Sanó abrió con doble ante los envíos de Espino. El pitcher Espino fue sustituido por Darío Álvarez quien fue recibido por doble empujador de Héctor Giménez, para que anotara Sanó. Estrellas 2, Toros 0.
Las Estrellas agregaron otras dos en el séptimo. Luego de un out Yasmany Tomás pegó sencillo al central. Fue sustituido por Emilio Gustave, quien se estafó la intermedia, Gustavo Núñez negoció boleto.
El lanzador Michael Dimock fue sustituido por Jhan Maríñez, quien tiró un wild pitch, que permitió que Gustave anotara desde la intermedia y Núñez se mudara hasta la segunda desde donde anotó por sencillo de José Sirí. Estrellas 4, Toros 0. Final.


Se acabó la espera, la más prolongada del deporte dominicano y una que exigió la paciencia de Job. La ley de Murphy (esa que asegura que si algo malo puede pasar pasará) no aplica más para las Estrellas Orientales.
En el trayecto de 51 años entre enero de 1968 y 2019, siete hombres ocuparon la presidencia de la República y hubo 13 elecciones, nació el 78% de la población dominicana de hoy según la CIA, aparecieron los celulares, la TV a color, las computadoras, la Internet, el país ingresó a la Serie del Caribe, montó dos Juegos Centroamericanos y del Caribe y hasta unos Panamericanos.
El miércoles 23 de enero, cinco décadas después, las Estrellas se quitaron el pesado mono de la espalda, enterraron la maldición que a los Cachorros les tomó más de un siglo y a los Medias Rojas 86 años. Sí, inexplicablemente en cualquier disciplina que no sea el suigéneris béisbol, la novena que nació en San Pedro de Macorís en 1910, la provincia que ha parido más peloteros per cápita del mundo, tierra de Sammy Sosa, Robinson Canó, George Bell, Pedro Guerrero, Tony Fernández, Juan Samuel, Alfredo Griffin, Tetelo Vargas, Rafael Batista y Johnny Cueto.
Cueto.
Dirigido por un petromacorisano histórico, Fernando Tatis II, el núcleo encabezado en el terreno por José Sirí, un monteplatense prestado de los Gigantes, los matrícula Serie 23 Fernando Tatis III, Junior Lake y Miguel Ángel Sanó rompió el maleficio, ayudado con un efectivo apoyo cubano (esos que trajeron el béisbol al país por el puerto de San Pedro a finales del siglo XIX) en Yunesky Maya, Néstor Cortés y Yasmany Tomás, la espera que parecía eterna llegó a su fin.
Desde 1968, por la novena verde pasó talento como Julio Franco, Alfonso Soriano, Vladimir Guerrero, Canó (en el dugout ayer, impedido de jugar), César Cedeño, Griffin, Félix José, Luis Mercedes, Joaquín Andújar y Armando Benítez sin que se pudiera poner a la sufrida fanaticada verde a gozar en el Macorís del Mar.
Eso se acabó ayer. No fue a la tercera oportunidad, ni a la quinta, tampoco a la décima. La oportunidad llegó en la ocasión 13, ese tan poco deseado número, pero que esta vez fue el de la suerte.
El juego final
El zurdo cubano Néstor Cortés lanzó seis entradas de cinco inofensivos hits, José Sirí no pudo faltar a la cita final con dos vuelta producida para comandar el triunfo 4-0, en el sexto partido de la serie pactada a un 9-5.
Con un parque Francisco Micheli repleto de gorras y banderas verdes, disfrazado en sus tribunas del Tetelo Vargas, los orientales completaron el 5-1 con blanqueada en los últimos dos partidos.
El triunfo otorga a los paquidermos el derecho de representar al país por primera vez en la Serie del Caribe, una que está programada jugarse en Venezuela a partir del dos de febrero, pero cuya celebración es hoy una gran interrogante.
Es el quinto equipo que gana en los últimos cinco torneos tras hacerlo los Gigantes en 2015, el Escogido en 2016, Licey en 2017 y las Águilas en 2018. Desde 2011 a la fecha las seis franquicias levantaron la corona, con los Toros en 2011.
Fue el segundo triunfo para Cortés en la serie. En una serie donde el pitcheo, la defensa y el bateo oportuno marcaron la diferencia. Los elefantes sobreanotaron 28-17.
El abridor panameño Paolo Espino, que toleró volvió a dominar cuatro entradas, pero el combustible se le acabó en el quinto. El venezolano Daniel Mayora abrió la entrada con doble al jardín izquierdo, avanzó a la antesala con rodado a segunda de Yasmany Tomás y anotó con imparable al derecho de Sirí.
En el sexto, Miguel Sanó abrió con doblete al izquierdo ante Espino. Subió a lanzar Darío Álvarez, que toleró hit productor al venezolano Héctor Giménez para el 2-0.
El ataque retornó en el séptimo. Tomás pegó hit, entró a correr Emilio Gustavé, que se robó la intermedia y Gustavo Núñez recibió boleto de Michael Dimock. Subió a lanzar Jhan Maríñez, que hizo un lanzamiento salvaje y entró el corredor de segunda para luego Sirí batear imparable productor detrás de primera.
Para Maya, es la tercera corona que gana en la pelota dominicana tras alzarla con Licey y Águilas. En el caso de Junior Lake es su segunda, pues reforzó en 2018 a las cuyayas.







$!Jugadores de las Estrellas se lanzan al terreno a celebrar tras completarse el out 27.

Jugadores de las Estrellas se lanzan al terreno a celebrar tras completarse el out 27.

Publicar un comentario

0 Comentarios