© Getty Images
Como decimos, Melania fue Primera Dama durante cuatro años, periodo en el que nos dejó impresionantes estilismos para el recuerdo, siempre caracterizados por la sofisticación y el minimalismo. Por eso, más o menos, podemos hacernos una idea de qué esperar en esta nueva etapa, que comienza con un conjunto propio de las royals mejor vestidas -de hecho, la reina Letizia tiene uno muy similar-. Ni rojo, color característico del partido de su marido, que él mismo llevó en la corbata, ni su adorado blanco ni el azul que también está presente en la bandera estadounidense: esta vez, lo ha apostado todo al gris, un tono neutro y muy acertado para un acto político de este estilo, en el que no se sabía si la noche acabaría en celebración o tristeza para ellos.
Concretamente, ha escogido un dos piezas que nos traslada al emblemático estilo New Look de Dior, que se popularizó en la década de los 50 y estaba ideado especialmente para potenciar la figura femenina. En el caso del de Melania, está protagonizado por una chaqueta estructurada muy favorecedora, un diseño de silueta cruzada que se entalla a la cintura y se ensancha bajo ella, consiguiendo un destacado efecto visual. Está confeccionada en un tejido de lana gris y cuenta con doble botonadura en negro y bolsillos laterales. Le ha sumado la falda a juego, un modelo midi de silueta recta por debajo de las rodillas que es sinónimo de versatilidad y elegancia atemporal.
Como es habitual en ella, ha rematado con unos altísimos salones, un par negro de puntera afilada y taconazo fino en negro. En cuanto al look de belleza, se ha mantenido totalmente fiel a su estilo, dejando la melena suelta, peinada con ondas naturales y raya al medio. Ha destacado también su manicura, con las uñas largas y diseño estilo baby boomer, es decir, combinación de esmalte rosa y blanco que se luce difuminado.
Su look para votar
Unas horas antes, para ir a votar, Donald Trump aparecía con su característica gorra roja con la frase 'Make America Great Again', su eslogan desde hace años. A su lado, Melania optaba por un diseño camisero -también muy royal- de Dior, una pieza azul marino adornada con lunares blancos que incorpora manga corta, botonadura frontal y cinturón fino confeccionado en el mismo tejido, detalle que estiliza y marca la figura.
Además de tratarse de un diseño atemporal, es reciclado, ya se lo habíamos visto, por lo que ha conseguido así evitar cualquier tipo de polémica o comentario negativo, algo que ha ocurrido en anteriores ocasiones. Lo combinaba con unos altísimos salones negros de Christian Louboutin y unas maxigafas de sol negras. De nuevo, su característica melena ondulada al viento.
Como decimos, Melania fue Primera Dama durante cuatro años, periodo en el que nos dejó impresionantes estilismos para el recuerdo, siempre caracterizados por la sofisticación y el minimalismo. Por eso, más o menos, podemos hacernos una idea de qué esperar en esta nueva etapa, que comienza con un conjunto propio de las royals mejor vestidas -de hecho, la reina Letizia tiene uno muy similar-. Ni rojo, color característico del partido de su marido, que él mismo llevó en la corbata, ni su adorado blanco ni el azul que también está presente en la bandera estadounidense: esta vez, lo ha apostado todo al gris, un tono neutro y muy acertado para un acto político de este estilo, en el que no se sabía si la noche acabaría en celebración o tristeza para ellos.
Concretamente, ha escogido un dos piezas que nos traslada al emblemático estilo New Look de Dior, que se popularizó en la década de los 50 y estaba ideado especialmente para potenciar la figura femenina. En el caso del de Melania, está protagonizado por una chaqueta estructurada muy favorecedora, un diseño de silueta cruzada que se entalla a la cintura y se ensancha bajo ella, consiguiendo un destacado efecto visual. Está confeccionada en un tejido de lana gris y cuenta con doble botonadura en negro y bolsillos laterales. Le ha sumado la falda a juego, un modelo midi de silueta recta por debajo de las rodillas que es sinónimo de versatilidad y elegancia atemporal.Trump se convierte en el nuevo presidente de Estados Unidos
Como es habitual en ella, ha rematado con unos altísimos salones, un par negro de puntera afilada y taconazo fino en negro. En cuanto al look de belleza, se ha mantenido totalmente fiel a su estilo, dejando la melena suelta, peinada con ondas naturales y raya al medio. Ha destacado también su manicura, con las uñas largas y diseño estilo baby boomer, es decir, combinación de esmalte rosa y blanco que se luce difuminado.
Su look para votar
Unas horas antes, para ir a votar, Donald Trump aparecía con su característica gorra roja con la frase 'Make America Great Again', su eslogan desde hace años. A su lado, Melania optaba por un diseño camisero -también muy royal- de Dior, una pieza azul marino adornada con lunares blancos que incorpora manga corta, botonadura frontal y cinturón fino confeccionado en el mismo tejido, detalle que estiliza y marca la figura.
Además de tratarse de un diseño atemporal, es reciclado, ya se lo habíamos visto, por lo que ha conseguido así evitar cualquier tipo de polémica o comentario negativo, algo que ha ocurrido en anteriores ocasiones. Lo combinaba con unos altísimos salones negros de Christian Louboutin y unas maxigafas de sol negras. De nuevo, su característica melena ondulada al viento.
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