No le es fácil conseguir el título, tan ansiado, a Serena Williams en la final de Wimbledon en All England. En frente se encuentra Anquelique Kerber, la número 2 del mundo, que quiere dar pelea con sus saques y devoluciones.
El primer set de la final fue muy parejo. La seis veces campeona de esta competencia no cedió ningun saque y pudo quebrarlo recién en el 13º para acercarse al título con el que igualaría a Steffi Graf en 22 Grand Slam ganados.
En el comienzo del segundo set se puede ver a Kerber más agresiva, tratando de conseguir rápidamente el quiebre. Williams, por su parte, mantiene el dominio del juego apoyada en su experiencia en finales.
Cerca estuvo, la alemana de quebrar el saque de su rival cuando empataban en 3 games, pero la efectividad de los saques de la número 1 del mundo se lo negó (12 aces)
La tenista de 34 años actualmente posee 21 títulos de Grand Slam y está a uno de alcanzar la marca que ostenta Steffi Graf. Vale mencionar que esta será la tercera posibilidad que tendrá para establecer este récord, ya que viene de caer contra Kerber en Melbourne y frente a la española Garbiñe Muguruza en Roland Garros.
Serena le envió un mensaje directo a su contrincante al quedarse con una contundente victoria: en apenas 48 minutos arrasó a la rusa Elena Vesnina 6-2 y 6-0, en la que fue la semifinal más rápida en la historia del torneo de Londres.
La germana, en cambio, se encuentra en claro ascenso al ser la cuarta mejor tenista del planeta y ya haber conseguido un título de Grand Slam, justamente ante la estadounidense.
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