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Jenny, la colombiana asesinada por el falso shaolín < VIDEO >

 Recién divorciada, sus amigos cuentan que se dedicaba a dar masajes a domicilio. Perdió un hijo hace 14 años y tenía otros dos, uno de ellos residente en Colombia

Jenny Sofía Rebollo Tuiran, una colombiana de 40 años con dos hijos, de seis y tres años, descuartizada por el shaolín experto en artes marciales Juan Carlos Aguilar, "pasaba una mala racha" tras separarse de su marido, según afirman algunos de sus conocidos.


Los restos de Jenny Rebollo fueron encontrados el domingo repartidos en la vivienda y el gimnasio que regentaba Aguilar, cuando la Policía registró esos lugares después de ser alertada por vecinos. Aguilar ya habìa agredido a otra mujer, la nigeriana Maureen Ada Otuya, de 29 años, quien falleció a causa de las lesiones sufridas.


Jenny Rebollo tenía dos hijos, uno de 3 años, que vivía con ella en Bilbao (norte de España), y otro de 6 años, que reside en Montería (Colombia), con su abuela.

Se había radicado en Europa en 1999 en busca de un futuro mejor, luego de sufrir la pérdida de un hijo de sólo 4 años que fue atropellado. 

“La vida de Jenny en Colombia transcurría sin grandes sobresaltos: entre semana acudía a la Universidad del Sinú, donde estudiaba Medicina, y en los ratos libres ayudaba a sus empleadas en la peluquería que regentaba en un conocido centro comercial. La muerte de su hijo de cuatro años lo cambió todo. Se separó y viajó a España para empezar de nuevo”, recuerda su amiga y vecina Jael en diálogo con el diario El País.  

En Bilbao, Aiber Ribera, el camarero de un bar al que solía acudir Jenny explicó que la mujer "pasaba por una mala racha".

"Tenía una peluquería, tenía dos niños y estaba casada con un chico de aquí, pero de un momento a otro se separó y comenzó a andar en cuestiones de tomar una cervecita; últimamente se veía muy sola, hace quince días estuvo aquí y le dije que no podíamos atender, que estaba cerrando".



Recordó que "cuando perdió el matrimonio tenía una peluquería, una vida muy estable, pero a partir de ahí (de la separación) comenzó con ese camino".

Laura Bedoya, que trabajó hace cinco años con Jenny Rebollo en una peluquería, comentó que era una chica "luchadora", que tenía problemas, "como todos".

Según esta antigua compañera, Jenny le había comentado últimamente que trabajaba a domicilio y que recibía cursos de peluquería en una academia.

En Colombia, la tía de la asesinada, Jóvita Turián, declaró a Caracol Radio que Jenny trabajaba en una peluquería antes de emigrar a España hace unos diez años, y que un hermano residía con ella en Bilbao.

Según fuentes de la investigación de los crímenes, la mujer colombiana ha sido identificada con rapidez debido a que la Policía tenía una ficha suya, con sus huellas dactilares.

El pasado 24 de mayo, la víspera del día en que podría haber sido asesinada, la mujer fue vista protagonizando algún altercado en una zona de alterne de la capital vizcaína, según las mismas fuentes.

Las dos víctimas,Maureen Ada Otuya y Jenny Sofía Rebollo Tuiran, ejercían la prostitución, según fuentes de la investigación.

Esta tarde los colombianos residentes en Bilbao planean convocar una concentración en la ciudad para mostrar su repudio por los hechos. Será a las 19h GMT.


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Juan Carlos Aguilar es el primer monje shaolín occidental ordenado en el monasterio chino de Songshan. Con esos antecedentes, abrió su propia cadena de gimnasios de artes marciales en Madrid.

En uno de ellos, la policía rescató a una mujer. Estaba en coma, con los pies, las manos y el cuello atados y con numerosas heridas por una brutal paliza, según difundió ABC.

Los vecinos habían alertado a las fuerzas de seguridad al oír los gritos de la mujer, de origen africano, cuando era obligada a entrar tomada por los pelos en el recinto.

Una vez adentro del lugar, las autoridades se encontraron con un infierno: en el gimnasio había restos óseos, que según los investigadores corresponderían a una persona fallecida recientemente. Ahora, buscan los despojos de otras víctimas.

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