El rector de la Universidad Autónoma de Santo
Domingo (UASD), Mateo Aquino Febrillet, dijo ayer que no teme por su
vida pese a las amenazas de estudiantes que el pasado viernes
protagonizaron disturbios en el campus, y defendió su derecho a
solicitar el auxilio de la fuerza pública para restablecer el orden
dentro de la academia.
Ayer, el cardenal cardenal Nicolás de
Jesús López Rodríguez se mostró preocupado por la situación en la UASD y
calificó de “grupos anárquicos” a los que promovieron los desórdenes
del pasado viernes.
Aunque Aquino Febrillet admitió que reforzó
su seguridad para prever cualquier inconveniente, atribuyó a expresiones
desaforadas los letreros de amenazas contra su vida. Durante los
disturbios del pasado viernes los manifestantes plasmaron en vehículos y
paredes “muerte rector, no habrá paz”.
Condenó que el presidente
de la Federación de Asociaciones de Profesores de la UASD (Faprouasd),
Ismael Peralta, acompañe en rueda de prensa a estudiantes que cometieron
los desmanes el pasado viernes, cuando varias personas resultaron
heridas, vehículos deteriorados y cristales de ventanas y puertas de la
rectoría rotos.
Subrayó que siempre ha estado dispuesto a dialogar
con los sectores opuestos a los aumentos de los precios de algunos
servicios dispuestos por el Consejo Universitario de la academia, y dijo
que si el gobierno dispone una asignación de fondos para la UASD, los
aumentos quedarían sin efecto.
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