La rápida reacción de un conductor de autobús hizo que la historia tuviera un final feliz.
CONEY
ISLAND/EDLP — Una pequeña se salvó de morir luego de saltar desde la
ventana de un tercer piso y caer en los brazos de un buen samaritano que
pasaba por el lugar.
El
hecho ocurrió alrededor de las 2 p.m. cuando la niña de siete años de
edad se encontraba en la ventana de su apartamento en Coney Island
Houses sobre un aparato de aire acondicionado.
La
rápida reacción de un conductor de autobús hizo que la historia tuviera
un final feliz. Los vecinos fueron testigos de los hechos que fueron
captados también en video. Incrédulos miraban a la pequeña bailando en
la parte superior del aire acondicionado poco antes de lanzarse al
vacío.
La menor
sobrevivió a la caída, gracias a la intervención del chofer de la
Autoridad Metropolitana de Tránsito (MTA), Steven St. Bernard, quien
caminaba por el lugar y vio a la niña segundos antes que cayera.
La niña no sufrió ninguna herida, pero St. Bernard tuvo que recibir tratamiento por una distensión muscular en el hombro.
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