¿Te quedaste sin Wi-Fi? Aquí te contamos cómo compartir los datos de tu iPhone con otros dispositivos —no solo de Apple—, para que puedas tener acceso a Internet en casi cualquier situación.
Puede ser muy frustrante quedarte sin internet cuando estás viajando, estás en una casa sin Wi-Fi o simplemente se cae tu conexión por cualquier razón. Aquí te explicamos en unos pasos muy sencillos cómo puedes compartir la conexión a Internet de tu celular con otro dispositivo, y así poder acceder a tu correo electrónico, redes sociales o hasta ver videos de YouTube y Netflix.
Primero que todo, sin embargo, es importante que sepas qué plan de datos usas con tu proveedor de telefonía, ya que al compartir la conexión internet de tu teléfono puede resultar bastante caro o puedes acabar con tu cuota de datos mensuales. En todo caso, esta función es muy útil si necesitas revisar tu correo de urgencia o ver algún mensaje o contactar a alguien.
PASO 1: Configuración
Lo primero que debes hacer es ir a "Configuración" en tu iPhone.
PASO 2: Compartir Internet
Después, haz clic donde dice "Compartir Internet".
PASO 3: Permitir que otros se conecten
Para compartir tu conexión a Internet debes habilitar el interruptor donde dice "Permitir a otros conectarse". Se va a cambiar a color verde cuando está activado.
Guarda la contraseña que aparece abajo, ya que la vas a necesitar para acceder desde el otro dispositivo. Si lo deseas, puedes cambiar la contraseña si haces clic donde dice "Contraseña Wi-Fi" para poner la que quieras.
PASO 4: Acceder a la red desde el otro dispositivo
Por último, debes buscar la red de tu celular en tu computadora. Selecciona "iPhone" o el nombre que asignaste a tu iPhone en la configuración de Wi-Fi de tu computadora u otro dispositivo.
Después de unos segundos, la conexión a Internet de tu teléfono estará disponible en el nuevo dispositivo. Es importante tomar en cuenta que esta característica va a consumir rápidamente la batería de tu iPhone, así que es muy útil para usarlo en situaciones breves quizá de emergencia. La conexión a Internet compartida no es tan rápida como una conexión Wi-Fi —o con un cable de ethernet—, pero sí sirve y, sinceramente, cuando uno se queda sin Wi-Fi una conexión lenta es mucho mejor que nada.
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