En el video revelado se puede observar cómo Ripley caminaba al borde del canal llevando de una mano al niño. De pronto se detiene por unos segundos, lo acerca a la orilla y lo empuja con fuerza al agua. Mientras el niño intentaba salir da la espalda y se echa a correr.
Un testigo que vive en el complejo residencial relató que también se dio cuenta lo que ocurrió esa tarde. “Sentimos como que estaban gritando y cuando vimos al canal, vimos al niño zambulléndose. Sacaba la cabeza y bajaba”, dijo Elier Perozo, quién además aseguró que la madre del pequeño aunque no se lanzó al agua, sí parecía preocupada.
Las autoridades policiales consideran este hecho como el primer intento de asesinato contra el pequeño, quien fue rescatado por unos vecinos que acudieron al lugar tras sentir ruidos.
Ripley lo volvió a intentar, y en un segundo intento lanzó a su hijo a otro canal, y fatalmente el niño perdería la vida.
“Esta vez, desafortunadamente, no había nadie allí para salvarlo”, lamentó Katherine Fernández Rundle, fiscal estatal de Miami-Dade.
Fernández Rundle declaró en rueda de prensa este sábado que Patricia Ripley intentó asesinar a su hijo en más de una ocasión, convirtiendo el hecho en un crimen que ha estremecido el sur de Florida.
"Él va a estar en un lugar mejor", dijo Ripley a la policía cuando admitió su culpa.
Inicialmente la acusada declaró que en la noche del jueves su hijo había sido secuestrado por dos hombres, cuando salía con su hijo cerca de un mercado Home Depot.
El investigador de la policía de Miami-Dade, Angel Rodríguez, guiándose por las primeras declaraciones, relató la versión de Ripley:
“El pasajero del auto salió del vehículo, se acercó a la madre y exigió drogas. Ella dijo que no tenía ninguna droga. Y entonces, este sujeto cogió el teléfono celular de la mujer y se llevó a su hijo”.
Luego, el cuerpo del pequeño Alejandro Ripley fue hallado en un estanque en el Miccosukee Golf & Country Club, en la tarde del viernes.
“Lo único que tengo que decir es que amamos nuestras vidas, amamos a Alejandro, y no estamos de acuerdo con lo que dicen de mi esposa”, dijo el padre del niño Alejandro Ripley, justo después de la audiencia de fianza de su cónyuge.
Patricia Ripley, la madre dominicana de Miami que admitió haber lanzado a su propio hijo a un canal para que se ahogara, habría cometido un delito de odio al señalar en una primera versión que su hija había sido secuestrado por dos hombres negros.
“Para ella, culpar de su crimen a otra comunidad, también es otro crimen el que se cometió. Es muy decepcionante ", declaró el director de la Policía de Miami-Dade, Alfredo Ramírez.
La dominicana Patricia Ripley, quien el jueves denunció que su hijo autista había sido secuestrado, admitió la madrugada deñ sábado que ella era la culpable de la muerte del niño de 9 años en un lago del condado de Miami-Dade y dijo que “él va a estar en un lugar mejor”.
La escalofriante confesión se produjo cuando los detectives de homicidios llevaron a Ripley, de 45 años, a la cárcel por cargos de asesinato en primer grado, tras quedar detenida después que ella informara que su hijo Alejandro había sido secuestrado por dos ladrones que llevaron su automóvil fuera de la carretera el jueves por la noche.
En su versión inicial, el jueves en la noche Ripley llamó a la policía con una historia dramática y extraña: un automóvil azul claro la obligó a salir de la carretera cerca de West Kendall Home Depot. Dos hombres negros estaban adentro. Uno de los hombres saltó, le dijo a la policía de Miami-Dade y exigió drogas. Cuando les dijo que no tenía, el hombre, armado con un cuchillo, tomó al niño, su teléfono celular y una tableta y se fue.
La búsqueda del niño, autista no verbal, terminó la madrugada del viernes cuando su cuerpo fue encontrado en un estanque en el Miccosukee Golf & Country Club.
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