El 10 de abril de 2018, la Federación Internacional del Automóvil (FIA) confirmaba a Porsche como uno de los nuevos constructores que entrarían en la Fórmula E para la temporada 2019-20. La historia de la marca alemana en la competición abría un nuevo capítulo y como tituló el vídeo de Youtube que encabeza este texto del año siguiente, le decía adiós a la zona de confort.
La idea fue clara desde el principio, trasladando a la mayoría del equipo de competición que años antes había triunfado en la máxima categoría de la resistencia a este campeonato de monoplazas ya asentado en el calendario FIA y con cada vez más seguidores a nivel mundial. El jefe de operaciones sería Amiel Lindesay, que puede presumir de tener en su palmarés tres títulos mundiales de fabricantes en el WEC, así como otras tantas victorias en las 24 horas de Le Mans con el Porsche 919 Hybrid en 2015, 2016 y 2017. El mismo que al principio de temporada declaraba que “tenemos altas las expectativas sobre nosotros mismos”. Está respaldado por un grupo reducido en el paddock, aunque siempre cuenta con la ayuda del departamento de Weissach (Alemania).
Pero un equipo técnico no es nadie sin unos buenos pilotos. El primero que se unió al proyecto fue Neel Jani. Su nombre está grabado en la historia de Porsche ya que ganó con ellos el Campeonato del Mundo de Resistencia y las 24 Horas de Le Mans de 2016, formando trío con Romais Dumas y Marc Lieb. Además, la Fórmula E no era nueva para él, ya que compitió en dos carreras en la temporada 2017-18 con el equipo Dragon Racing. A su lado está André Lotterer, con pasado también en la marca donde hizo equipo con Jani en 2017, y que había acumulado dos temporadas en el certamen eléctrico con el equipo Techeetah (desde el año pasado DS) sin conseguir todavía una victoria. En su palmarés hay un Campeonato del Mundo de Resistencia, tres victorias en las 24 Horas de Le Mans y tres títulos más en el Campeonato Japonés de Turismos.
Completaría la terna el coche. Tras varias pruebas en el Circuito de Calafat, la presentación oficial se produjo con un videojuego de la web twitch.tv donde los aficionados ayudaron a Jani y Lotterer a desvelar el monoplaza. Se bautizó como 99X, usando el número más alto, el nueve, dos vez para remarcar la importancia del proyecto de la Fórmula E para Porsche y la equis quiere representar un enfoque prospectivo. Hay que recordar que las normas solo permiten desarrollar a cada equipo el motor, la transmisión, el inversor y la suspensión trasera, el resto es común para todos.
Con el objetivo de estar en los puntos, el equipo de Porsche en la Fórmula E tuvo una gran alegría al conseguir Lotterer un segundo puesto en la primera carrera del Diriyah ePrix (Arabia Saudi). Tras eso solo el piloto alemán ha sumado otros siete puntos más tras conseguir la pole en el ePrix Ciudad de México y un octavo puesto en el ePrix de Marrakesh. Además, a día de hoy con el campeonato parado, son novenos en la clasificación de escuderías.
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