Así podrás ponerte en forma en un tiempo récord

Tal vez no sepas que muchos de los dispositivos más avanzados (robots, autómatas, automatismos, dispositivos biónicos, etc.); aquellos con los que se consigue, por ejemplo, acceder al interior de un órgano enfermo sin necesidad de abrirlo y explorar o reparar una lesión; permiten esculpir el cuerpo de manera eficaz, rápida y segura

Hoy en día, utilizando los últimos avances tecnológicos, en una sesión de poco más de una hora se pueden moldear los glúteos, las piernas, la cintura y las caderas. También es posible eliminar los michelines, reducir la celulitis y atenuar la flaccidez

Hora de volver al gimnasio, con sus rutinas de ejercicios. Hora de las dietas híperproteicas o las disociadas; los ayunos y los batidos detox. Y un interminable etcétera. Empieza la cuenta atrás con esos largos meses de sacrificio para lucir una bonita figura este verano.

Pero, ¿y si en sesenta minutos y sin esfuerzo pudiésemos alcanzar el mismo resultado? Parece mentira, sacado de una película de ciencia ficción. Sin embargo, es lo que se puede conseguir utilizando los dispositivos más avanzados. Actualmente, es posible eliminar la grasa antiestética en prácticamente un abrir y cerrar de ojos. Basta una sesión de una hora para lograr, además de la figura deseada, reducir la celulitis y atenuar la flacidez de las zonas tratadas.

Tener un abdomen plano es objetivo prioritario para muchas personas (UMEC)

Ahora se puede modelar la silueta utilizando los últimos avances tecnológicos. Lo más ‘trendy’ es una técnica quirúrgica de alta precisión; tan avanzada que permite esculpir el cuerpo evitando las incisiones traumáticas, los puntos de sutura, las cicatrices y la mayor parte de las molestias postoperatorias. Los procedimientos se practican habitualmente bajo anestesia local y no requieren hospitalización. Por norma general, se puede hacer vida normal el día después del tratamiento. Quienes lo han probado aseguran que es toda una revolución.

Transformación estética de última generación

Este procedimiento de transformación estética, sin duda por su rapidez y eficacia, triunfa en los países más avanzados del mundo. Aquí lo realiza el equipo de la Unidad de Remodelación Corporal en el Hospital Universitario Dexeus de Barcelona (teléfono 932 032 371). Antes de someterse al tratamiento es necesario realizar una visita diagnóstica para descartar cualquier tipo de contraindicación, conocer los pormenores del método, sus alternativas, las posibles molestias y complicaciones y saber lo que se puede conseguir. 

El precio varía en función de la complejidad del caso, el número de zonas que sea necesario tratar y la cantidad de grasa a extraer. La visita diagnóstica cuesta 30 euros y la intervención oscila entre los 2.000 y los 3.500 euros.

Durante los procedimientos, para esculpir el cuerpo se utilizan los últimos avances tecnológicos

Esta puesta a punto ‘beauty’ consiste en bombardear los depósitos de grasa antiestética con la energía generada por un aparato tecnológicamente avanzado. La energía atraviesa la piel sin dañarla, llega al tejido graso y, además de fulminar la grasa, provoca una contracción de la piel (efecto ‘lifting’) capaz de atenuar la flaccidez.

El proceso de desintegración de la grasa es muy preciso. Mediante un escáner corporal de alta precisión (que permite visualizar el interior de las zonas a tratar y conocer su estado) se determina la cantidad de grasa a eliminar de cada zona para obtener un buen resultado.

Después, a través de una incisión milimétrica que no requiere puntos de sutura, introducen en la zona tratada un dispositivo de última generación. Este ‘gadget’ médico extrae fuera del organismo la grasa disuelta por la acción de la energía.

El tratamiento consigue moldear los glúteos, las piernas, la cintura y las caderas. También es posible reducir la celulitis y atenuar la flaccidez (UMEC)

Finalmente, en las zonas de donde se extrajo la grasa, se efectúa un masaje específico con un rodillo motorizado que actúa regularizando la superficie de la piel, dejándola más lisa.

Tecnología contra la grasa no deseada
Las primeras técnicas quirúrgicas empleadas para eliminar las acumulaciones de grasa antiestética eran muy traumáticas y dejaban grandes cicatrices en las zonas que habían sido tratadas.

Con el paso del tiempo, empezó a practicarse una intervención con la que se conseguía extraer la grasa no deseada a través de pequeños orificios, sin abrir casi la piel, es decir, sin dejar prácticamente cicatrices visibles.

Al principio, debido a la falta de medios, era un procedimiento rudimentario que resultaba bastante traumático y, en muchos de los casos, no se obtenía un resultado estético aceptable. El método ha ido evolucionando hasta nuestros días.

Actualmente, utilizando dispositivos de última generación, es posible destruir los depósitos de grasa que deforman el cuerpo, reducir la celulitis y atenuar la flaccidez de forma rápida y segura. Además, esta tecnología permite esculpir el cuerpo evitando las incisiones traumáticas, los puntos de sutura y las cicatrices.