Un 90 % de la información que recibimos al volante nos llega a través de los ojos. La vista es un sentido esencial en la conducción, por eso es fundamental cuidársela y mantener en buen estado todos aquellos elementos que la facilitan, como por ejemplo el parabrisas o los espejos retrovisores.
Sin embargo, a medida que pasan los años y la tecnología cada vez toma un papel más importante en el sector de la automoción, conceptos como conducción autónoma, coche conectado o internet de las cosas van cogiendo más peso y van reformulando el concepto de la movilidad y la relación de los usuarios con los vehículos.
Un ejemplo de ello es que los espejos retrovisores exteriores de los coches, tal y como los conocemos en la actualidad, muy posiblemente irán desapareciendo para dar paso a elementos de seguridad más tecnológicos, basados en cámaras. El primer automóvil que montó este tipo de innovadores componentes (Digital Outers Mirrors) fue el Lexus ES, una solución que incorporó a finales del 2018 pero que solo estuvo disponible en el mercado japonés.
El SUV eléctrico de Audi, el e-tron , fue el primer vehículo en incorporar estas cámaras que llegó al mercado español. Posteriormente le siguió el Honda e , que se presentó a finales del año pasado. Ahora, Lexus, ha decidido hacer su debut europeo presentando sus retrovisores digitales de visión lateral en su berlina híbrida premium ES 300h en el Salón del Automóvil de Ginebra 2020.
Este sistema tiene el objetivo de sustituir a los retrovisores convencionales por unas cámaras externas compactas de alta resolución, conectadas a unos monitores dentro del vehículo. De esta forma, el conductor consigue una vista mejorada de la zona posterior e inmediatamente lateral del vehículo, sean cuales sean las condiciones climáticas, reduciendo o eliminando por completo los ángulos muertos del conductor, y además se adaptan automáticamente para ofrecer una visión ampliada cuando el vehículo gira o circula marcha atrás.
Diseño y funciones
Se trata de dos monitores en color de 12,7cm (5”) situados en la base de los pilares delanteros, justo a la altura de los retrovisores, de manera que están en la línea con la visión intuitiva del conductor. Su diseño ergonómico permite tener una visión completa alrededor del vehículo, reduciendo así el movimiento de la cabeza, en línea con la intención de Lexus de minimizar el esfuerzo del conductor.
Su tamaño es inferior al de los retrovisores convencionales y esto permite que se reduzca el ruido del viento y que su posición no interfiera tanto en la visión en diagonal hacia delante del conductor. Asimismo, cuentan con calefactores integrados para evitar que se forme hielo o vaho, y están colocadas de manera que no puedan quedar tapadas por gotas de agua o copos de nieve. Si es preciso, el conductor puede activar en cualquier momento el anti-vaho mediante un interruptor en el salpicadero para garantizar una imagen clara.
Uno de los grandes obstáculos que presentan los retrovisores es que al conducir de noche existe el riesgo de quedarse deslumbrado, y dejar de ver durante unos segundos, por los faros de los vehículos que circulan detrás. Para evitar ese problema, este sistema cuenta con un sensor de luminosidad que reduce automáticamente el deslumbramiento para que el conductor pueda tener siempre una visión clara.
Visión ampliada automática
Uno de los grandes adversarios de los conductores son los llamados ángulos muertos o puntos ciegos. Se trata de aquellos “huecos” visuales en los que podemos perder la referencia de un vehículo que viene por detrás o por otro carril. Y esto supone un peligro para nuestra seguridad y la de los demás.
El dato
Su diseño ergonómico permite tener una visión completa alrededor del vehículo, reduciendo así el movimiento de la cabeza
Las cámaras de Lexus están pensadas para evitar este riesgo. Cuando el conductor activa los intermitentes o selecciona la marcha atrás, estos retrovisores digitales presentan automáticamente una visión ampliada de la zona junto al vehículo y detrás del mismo, eliminando los ángulos muertos y ayudando a maniobrar de forma más segura. En la esquina de la pantalla aparece un icono que alerta al conductor del cambio de la relación de aspecto. Una vez finalizada la maniobra de giro, cambio de carril o aparcamiento, el sistema vuelve automáticamente a la configuración estándar.
Para ajustarlas, el conductor, igual que si lo hiciera con los retrovisores convencionales, dispone de unos controles en el panel de la puerta para mover las cámaras según su necesidad. También pueden modificarse algunas opciones del sistema como por ejemplo el brillo y la retracción automática de las cámaras al estacionar el vehículo. El sistema incorpora asimismo un Control de ángulo muerto.
Línea de referencia automáticas
Para ayudar al conductor a posicionar el vehículo de forma segura al aparcar o circular a la distancia de seguridad correcta, el sistema añade automáticamente líneas de guía de referencia a las imágenes. Al aparcar, las líneas indican distancias de 20 y 50 cm desde el paragolpes trasero, y de 50 cm a cada lado del vehículo; y al circular las líneas indican 5 m, 10 m y 15 m por delante, si circula a una velocidad de hasta 70 km/h. A velocidades superiores, las distancias indicadas son de 5 m, 10 m, 15 m y 30 m.
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