Pese a que tres de los acusados señalan a Víctor Manuel Tejada Viñas como el autor intelectual, un tribunal de primera instancia del Distrito Judicial de Duarte lo dejó en libertad, decisión que ha indignado a la víctima a sus familiares y a la sociedad macorisana.
Se trata del asalto del que fue víctima el sábado 25 de noviembre del 2017 el Ing. Aví Dayan Hidalgo Espinal, cuando se disponía a hacer el pago a los trabajadores del proyecto residencial que construía en una urbanización de aquí. Los asaltantes lo despojaron de 600 mil pesos con los cuales iba a pagar la nómina semanal de los obreros.
El tribunal lo componen las juezas Carminia Caminero, Manuela Acosta y Nilsa Marte. Caminero consideró a Víctor Manuel como cómplice del hecho al valorar su declaración como imputado y las pruebas de los testigos.
Sin embargo Acosta y Marte lo declararon no culpable al considerar que la prueba de la relación de llamadas realizadas por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) no sería aceptada al no haber sido presentada por un perito durante el juicio de fondo y que los testigos no fueron suficientes ni los testimonios presentados.
El tribunal aceptó la petición de la fiscalía y condenó a cinco años suspendidos a Miguel Angel Almánzar como premio a su colaboración en el juicio en el cual se declaró culpable de haber sido el enlace entre el autor intelectual y los autores materiales.
Carlitos de los Santos Quezada (Tatico) quien fue uno de los que disparó al Ing. Hidalgo Espinal, se declaró culpable como uno de los autores materiales, fue sentenciado a tres años de prisión dos de los cuales suspendidos y José Contreras (Chanel) continúa prófugo.
Chanel Contreras fue quien hirió de bala al profesional afectándole el hígado y los intestinos. Fue el primero en ser apresado, ofreció su declaración sobre el hecho señalando a Víctor Manuel como autor intelectual, sin embargo lo dejaron en libertad por un acuerdo con la fiscalía para que actuara como testigo, pero se dio a la fuga y sigue prófugo.
Mediante llamada telefónica un reportero de este rotativo le preguntó sobre ese acuerdo al fiscal titular de entonces, licenciado Regís Victorio Reyes, y respondió que no lo recuerda, pero la ley faculta a hacer determinados tipos de convenidos con imputados para conseguir condenas ejemplarizadoras.
Sin embargo Víctor Manuel Tejada Viñas, quien era el capataz del proyecto residencial e identificado por los ejecutores del asalto como la persona que lo concibió y planificó, fue dejado en libertad pura y simple.
Mientras que al Ing. Hidalgo Espinal los médicos tuvieron que cortarle los intestinos en cinco partes, situación que ahora le genera inflamaciones que obligan a su familia a internarlo con frecuencia.
Consultamos a un jurista para que nos explicara lo que significa Prisión Suspendida. Nos dijo que “cuando un tribunal dicta prisión suspendida la persona no va a un centro carcelario a cumplir condena. Podemos decir que es como un perdón o una liberación al cumplimiento de una condena. En algunos casos este privilegio puede ser condicional”.
EL JAYA preguntó al Ing. Aví Hidalgo si apelará esta sentencia, a lo que respondió: “Consideraré la posibilidad de apelar cuando la sentencia haya salido. No esperábamos esta decisión, pero quiero sentir conformidad porque quizás así yo recupere mi libertad. Cuando decidí buscar justicia hace casi dos años, puse mi vida normal y productiva en pausa, pero en realidad me convertí en preso de la justicia con más dificultades que los mismos individuos que guardaban prisión por el asalto del que fui víctima. Verlos cada mes ‘más bonitos y gorditos’ y sin preocupaciones, era una burla y tener que lidiar afuera con los problemas de la vida diaria y asistir al tribunal tres y cuatro veces cada mes, con citas desde las 9:00 AM, pero sin orden de llegada, esperando hasta horas de la tarde, para cuando se entra a la audiencia enterarse que será reenviada, lo cual ocurría incontables ocasiones hasta llegar al agotamiento”.
Agrega que “los retrasos causados por los reenvíos me parecían estrategia para jugar al cansancio, al desgaste físico y mental de las víctimas. Es una prueba difícil de aguantar, por eso hay tantas personas que abandonan los procesos judiciales. Creo que la permisividad del sistema de justicia a favor de la delincuencia, parece estar diseñada para perjudicar y traumatizar a las víctimas. A pesar de lo que me ha tocado vivir durante todos estos meses, me siento agradecido de Dios por darme una segunda oportunidad de vivir, agradezco a mis médicos por haberme salvado la vida y reconozco la labor que realizó la Policía Nacional cuyas investigaciones permitieron apresar a los responsables. Pero es indignante ver cómo desde el sistema judicial se crean las condiciones para la impunidad y me entristece pensar en el poco valor que tiene la vida de un ser humano, sin embargo me reconforta saber que todos rendiremos cuentas ante la justicia de Dios”.
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