News

6/recent/ticker-posts

¿Recuerdas esas frases que tu madre te decía?


Sabios consejos y dulces palabras de apoyo son solo algunas de las razones por las que mamá es una figura tan importante en la formación de cada persona; y es que todos los comentarios que hace una madre son perlas de sabiduría y siguen siendo importantes lecciones de vida. Por eso ahora veremos algunas de esas frases que cada madre ha dicho en algún momento de su vida, aunque la terminología exacta puede variar en cada caso, la esencia materna es impermutable.
“Usted no se gobierna, en esta casa mando yo”
Nuestra primera frase es quizás la más importante porque cumple varias funciones: primero, es una declaración precisa sobre quién es la autoridad en el hogar y, segundo, es una advertencia inmediata para que el niño o niña se detenga al instante y mire a su madre atentamente para esperar sus próximas instrucciones; o también puede dejar claro que ese momento es la última oportunidad para que la criatura pida perdón mientras sale lentamente de la habitación.
“Esto no es un restaurante, aquí se come lo que preparo”
Este comentario (¿o comando?) es sumamente importante porque cada madre tiene la difícil tarea de asegurarse de que sus hijos reciban una alimentación saludable, aunque es una tarea casi imposible cuando surgen inconvenientes como el deseo de comer dulces o comida chatarra en vez de una deliciosa ensalada.
“Aquí no se desperdicia comida / Ese plato hay que dejarlo limpio”
Esta es una variante de la frase anterior porque volvemos a tratar el tema de la alimentación aunque desde otro punto de pista, es decir que no solo con esta frase la madre se concentra más en cantidad que en calidad, también la da una idea a sus hijos de lo importante que es la administración de bienes.
“No me subas la voz / No me hables con ese tono”
Esta frase es un clásico en el repertorio de cualquier madre y una gran lección para cualquier joven que aún no ha aprendido qué tan valiosa es la habilidad de controlar el tono y volumen de su voz para así aprender a comunicarse como una persona educada y evitar cualquier discusión que puede terminar con un boche o una chancleta voladora.
“Estas no son horas para llegar a tu casa”
Esta es una lección atemporal sobre lo primordial que es para una persona saber administrar su tiempo para cumplir con compromisos y llegar a los lugares a la hora que ha sido designada, es más, esta lección es casi tan importante como aprender a desarrollar la habilidad de abrir la puerta de la casa sin hacer ruido.
“Será mejor que hayas terminado tu tarea si vas a ver televisión”
Esta frase se puede actualizar y reemplazar las palabras “ver televisión” por aquellas que se ajusten a una situación específica como, por ejemplo, “jugar videojuegos” o “chatear por el celular”, etc., aun así el mensaje sigue siendo el mismo y más le vale al joven haber cumplido con sus responsabilidades antes de dedicarse a cualquier actividad divertida, de lo contrario se tendrá que enfrentar a la “furia materna”.
“Si todos tus amigos se tiran de un puente, ¿tú también lo harías?”
Esta frase es otra opción muy popular en el catálogo de cualquier madre, especialmente en medio de una discusión y es una estocada de la cual es difícil recuperarse porque le roba toda validez a cualquier argumento que un niño o niña utilizó anteriormente. Ojo, mientras más joven el niño/niña, más efectiva es esta frase.“Ojalá que tus hijos sean igualitos a ti”
Esta es la frase más épica que puede utilizar cualquier madre porque con solo 8 palabras (la cantidad puede variar según la aplicación de la frase) logra que su hijo o hijo inicie un profundo proceso de autorreflexión en el que revalúa su vida y pone en duda todas las decisiones que ha tomado hasta ese momento.

Publicar un comentario

0 Comentarios