Es un hecho que el pleno de la Junta Central Electoral dispuso rechazar el reconocimiento de cuatro partidos y siete movimientos independientes, argumentando que no lograron completar las documentaciones requeridas para obtener su personería jurídica.
Entre las víctimas figuran el Partido Nacionalista Dominicano y los Movimientos que llevan por nombres “Movimiento Independiente Popular (MICHO)”, “Uno para Todos y Todos para Uno”, “Nuevo Renacer” y “Movimiento Verde Revolucionario Francomacorisano”, que auspicia el licenciado Silvestre Abreu.
Diversos sectores han visto con buenos ojos la decisión del máximo organismo electoral del país, argumentando que si no se pone un alto al reconocimiento de tantos partidos y agrupaciones políticas, llegará un tiempo no muy lejano, que éstos serán más que el pueblo votante.
En el pasado reciente reconocidos politólogos han planteado a los congresistas y líderes del sistema político nacional, discutir la posibilidad de congelar por 20 o 30 años el reconocimiento legal de nuevas agrupaciones políticas.
A primera vista muchos acogieron el planteamiento, pero al parecer les tumbaron el pulso los personajes que han soñado ver financiadas sus actividades políticas y sociales a través de los millones de pesos que destina el Estado Dominicano para la Junta Central Electoral.
La Industria Política es tan lucrativa y en consecuencia produce tanto privilegio, que muchos ciudadanos seguirán intentando tener una sucursal en su misma residencia, para no “bajar el lomo” en el resto de su vida.
Antonio María Jiménez es locutor y periodista, director del Noticiario 1070 y dirige varios programas en Hibi Radio. Correo: redaccion@antoniomaria.net
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