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Una modelo de Sport Illustrated le dio el pecho a su bebé mientras desfilaba sobre la pasarela



La modelo Mara Martin desfiló para Sports Illustrated amamantando a su bebé (Instagram Sports Illustrated)

La modelo de 30 años de edad sorprendió a los presentes desfilando sobre la pasarela en traje de baño este domingo mientras le daba el pecho a su bebé, Aria, de 5 meses, a quien llevaba en brazos.


Martin, de Monroe, Michigan, es una de las 16 finalistas seleccionadas durante un casting abierto a todo el público y en el cual también quedaron una guardia de seguridad y una empleada doméstica. 

Antes de iniciar la presentación, Martin compartió una foto en su cuenta de Instagram expresando lo emocionada y agradecida que estaba de poder participar con su hija del desfile.
"La cara que haces cuando tu mamá queda seleccionada entre las 16 finalistas del @si_swimsuit.

Estoy tan agradecida a todo el equipo de Sports Illustrated por haberme elegido", manifestó la maniquí.

El público ovacionó a la modelo quien vistió un traje de baño dorado que bajó del lado derecho para poder amamantar a la pequeña, quien también estaba apropiadamente vestida con un bikini color verde y auriculares para proteger los oídos de la música.

Mara Martin quiso transmitir un mensaje de empoderamiento femenino (Instagram Sports Illustrated)

"Me siento muy agradecida de poder compartir este mensaje y, con un poco de suerte, normalizar la lactancia materna y también mostrar a otros que las mujeres PUEDEN HACER TODO", continuó Martin emocionada por la experiencia vivida y el mensaje que transmitió.

La modelo Mara Martin quedó seleccionada entre 16 finalistas para el desfile de Sports Illustrated "Esto es tan poderoso", manifestó Haley Kalil, ganadora del concurso de Sports Illustrated y quien también participó del evento.

Sin embargo, no todas las opiniones fueron positivas.

Algunos criticaron a la modelo y manifestaron que les parecía una estrategia innecesaria para captar la atención de los medios.

Otros se mostraron enojados por hacer público un momento tan íntimo, y denunciaron que "ya nada es sagrado".

Pero la gran mayoría aplaudió la idea y algunos incluso aseguraron que fue "una de las cosas más bellas que han visto" en un desfile.

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