La araña embudo australiana (Atrax robustus) está considerada la araña más peligrosa del mundo. No solo frecuenta las viviendas, sino que es muy agresiva y su veneno es letal para los seres humanos. En Australia acaban de encontrar un ejemplar gigante de la especie que casi duplica el de los machos normales.
El macho de la araña embudo australiana mide entre 1 y 5 centímetros. El Parque de Reptiles de Australia acaba de presentar en sociedad un ejemplar que mide 7,8 centímetros. Es incluso más grande que las hembras, cuyo tamaño puede alcanzar los 6 o 7 cm.
El ejemplar, apropiadamente bautizado como Colossus pasará a formar parte del programa de recolección de veneno de la institución.
La toxina de la Atrax robustus tiene una curiosa peculiaridad bioquímica: solo es mortal para los insectos y para los primates, incluyendo los seres humanos.
Cuando llega la época cálida, los machos de Atrax Robustus deambulan en busca de hembras, lo que a menudo les lleva a internarse en viviendas o caer en piscinas. Pueden sobrevivir horas bajo el agua y no es la primera vez que muerden a una persona cuando esta saca una araña del agua pensando que estaba muerta. Cada año se registran entre 30 y 40 ataques de arañas de tela de embudo australiana a personas, y la única razón por la que no ha habido muertes desde 1981 es porque el país ha establecido un eficaz programa de recolección de veneno y elaboración de antídoto. Colossus es el “empleado” más reciente de este programa.
Después de extraer el veneno, los biólogos lo inyectan en alguna especie de animal inmune al mismo (lo habitual son conejos). El sistema inmune del animal desarrolla anticuerpos que luego son aislados para su uso en víctimas de mordedura. El veneno de las hembras es 30 veces menos potente que el de los machos.
Si no se trata, la mordedura de la araña de tela de embudo australiana macho puede matar en un plazo de entre 15 minutos y dos días. La lista de síntomas incluye náuseas, vómitos, salivación y sudor excesivos, dificultad respiratoria, desorientación y coma por hipertensión, acidosis metabólica, dilatación de las pupilas, contracciones musculares involuntarias y edema pulmonar. La muerte suele producirse por hipotensión progresiva o por edema cerebral debido al aumento de la presión intracraneal.
Colossus no es la Atrax robustus más grande que se ha encontrado. El Parque de Reptiles de Australia. En 2016 tuvo a Big Boy, un ejemplar de 10 centímetros. [Australian Reptile Park vía Science Alert]
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