Page no ha sido acusado de ningún crimen.
Una nueva posible conexión entre Rusia y personas cercanas al presidente estadounidense, Donald Trump, se acaba de hacer pública.
En esta oportunidad involucra a Carter Page, asesor del mandatario durante la campaña presidencial que culminó con su triunfo en las elecciones celebradas en noviembre del año pasado.
Un informe del periódico estadounidense The Washington Post reveló que el Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés) obtuvo una orden judicial en el verano boreal de 2016 para tener acceso a las comunicaciones entre Page y funcionarios rusos.
El FBI consideraba que el hombre podría haber fungido como intermediario de un gobierno extranjero,lo cual está estrictamente regulado por la legislación estadounidense.
Estos contactos serán parte de la evidencia que se analiza en la investigación sobre la posible injerencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016, que lleva adelante el congreso estadounidense.
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Page no ha sido acusado de cometer ningún crimen, y en este momento se desconoce si el Departamento de Justicia presentará cargos en su contra.
Según The Washington Post, este tipo de investigaciones -en muchos de los casos- no culmina con la presentación de cargos criminales.
La lista se hace más larga
En los últimos meses varios vínculos entre Rusia y el equipo que rodea a Trump han quedado expuestos.
Michael Flynn, quien fuera asesor nacional de seguridad del presidente estadounidense por un breve período de tiempo, se vio obligado a renunciar al cargo debido a que se descubrió que había ocultado información acerca de sus encuentros con el embajador ruso en EE.UU., Sergey Kislyak.
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Jared Kushner, yerno y asesor de Trump, será interrogado por el Comité de Inteligencia del Senado de EE.UU. en el marco de la investigación que se realiza acerca de la posible intromisión rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
Por su parte, Jeff Sessions, el nuevo fiscal general estadounidense, también reveló que mantuvo conversaciones con el embajador de Rusia durante la campaña presidencial, por lo que se vio forzado a recusarse de participar en la investigación referida con anterioridad.
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